El arte para la solidaridad

El arte puede ser un buen camino para ayudar a construir el mundo mejor que todos deseamos, para despertar la imaginación y la creatividad de la juventud y la niñez, cercenada por la violencia, la pobreza, el hambre, la enfermedad, la falta de vivienda adecuada y la exclusión. Debemos tener como meta abrir esa ventana en aquellos niños, jóvenes y adultos que están postrados en el desespero, la hostilidad y la guerra, tenemos que contribuir a reconstruir los vínculos perdidos por la violencia y el destierro y todo el resto de problemas.

El arte puede ser tan solo la materia prima para iniciar el cambio y el activismo y, la gestión cultural no puede ser fiebre de un día, ni mucho menos un titular de periódico, debe ser una causa que debe cuajar en el imaginario de todos, para derramar solidaridad sobre aquellos que la necesitan, al tiempo que se promueven la igualdad entre los sexos, la salud, la educación, la sostenibilidad ambiental y un camino de solución de tantos problemas que nos afectan.

Cuando la estética, la belleza y la armonía se encuentran con la solidaridad se produce una explosión especial que da al arte una nueva dimensión. Los objetos dejan de ser meramente decorativos o hechos para contemplarse sin más y pasan a ser una herramienta para hacer un mundo mejor.

Unir arte con solidaridad nos lleva a luchar por:

• Potenciar el desarrollo artístico del ser humano;
• Erradicar la destrucción del arte de nuestros antepasados;
• Promocionar el conocimiento de los diferentes movimientos culturales;
• Promocionar el desarrollo del arte de la infancia y los más jóvenes;
• Apoyar el desarrollo de las arte típicas y de origen étnico e indígena;
• Promover el acceso al arte y la cultura en todos sus ámbitos, a todas las poblaciones del mundo;
• Desarrollar programas específicos en cada región para potenciar las artes locales;
• Organizar eventos artísticos y culturales de todo tipo, abiertos a todos;
• Dar acceso a oportunidades educativas, crear programas de difusión de la cultura a través de la música, la danza, el teatro, la literatura y las artes visuales.

Gracias a la solidaridad por el arte se puede llegar a:

• Construir un mundo en el que todos los niños y jóvenes sean tratados con dignidad, respeto, comprensión y compasión;
• Hacer posible que los niños y jóvenes colaboren con otros independiente de la distancia, los idiomas, la cultura y, promover sus habilidades sociales;
• Desarrollar la creatividad y, construir redes sociales a través de las culturas y las fronteras;
• Motivar a los niños y jóvenes a aprender sobre sus intereses personales y los objetivos de vivir, ayudarles a desarrollar aptitudes para la vida.

El arte puede ayudar a expresar sentimientos complejos que de otro modo podrían ser difíciles de articular, promover el espíritu de comunidad entre los todos, proporcionando una oportunidad para el crecimiento y el compañerismo, y despertar en los niños y jóvenes su curiosidad sobre el mundo, haciendo arte por la capacidad de maravillarse ante lo que aprenden. Por todo ello, y muchas más razones, es importante:

• Promover el acceso al arte y la cultura en todos sus ámbitos, a todo el mundo;
• Promover que los niños y jóvenes presenten obras de arte con sus sueños, sus actividades, sus esperanzas en la vida;
• Promover todas las ramas del arte, la pintura, la escultura, la fotografía, la música, incluso la literatura y otras manifestaciones;
• Promover exposiciones con obras de arte enviadas desde todo el mundo;
• Organizar eventos artísticos y culturales y, dar acceso a oportunidades educativas;
• Organizar subastas benéficas con las obras de arte realizadas para obtener fondos que permitan mejorar las condiciones de educación, salud y vida en general.